LA AGONÍA POLÍTICA DEL GOBIERNO
Los hechos.
Primer acto, un periodista publica que, a través del programa “Pegasus”, se ha espiado a los líderes independentistas catalanes. La noticia no es nueva, pero Bildu, ERC, Junts y PNV hacen de ella una bandera y comienzan el asedio a Sánchez.
En el siguiente acto, de forma sorprendente, un lunes a primera hora el ministro Bolaños convoca a la prensa para manifestar que los teléfonos de Pedro Sánchez y Margarita Robles han sido espiados, en mayo-junio del 21, con “Pegasus”. Posteriormente se sabe que también han sido hakeados los teléfonos del Ministro de Interior y el de Agricultura (anteriormente embajador en Marruecos), en las mismas fechas. Como quiera que esas fechas coinciden con la crisis con Marruecos, toda la prensa da por seguro que dichos espionajes han sido de nuestro vecino del sur.
Tercer acto, la Presidenta del Congreso maniobra para introducir en la comisión de secretos oficiales a representantes de Podemos, ERC, Bildu y Junts. Se celebra la reunión de dicha comisión con la directora del CNI. En ella se aporta la documentación del uso de Pegasus a una docena de líderes independentistas, durante la época de los Comités de Defensa de la República (CDR) y el Tsunami Democratic que incendió las autovías, bloqueó el aeropuerto y vandalizó la ciudad. Entre los espiados está Pere Aragonés, actual presidente de la Generalitat, como animador de estos grupúsculos. Las escuchas se realizaron con autorización judicial tras petición motivada.
Desenlace. Ante las amenazas de los independentistas de dar un golpe de gracia al gobierno en el Congreso, la ministra Margarita Robles cesa Paz esteban (directora del CNI), sin ser capaz de explicar el motivo del cese. Al día siguiente Sánchez vuelca en el CNI la obligación de haber detectado el espionaje (presuntamente de Marruecos) de los móviles del gobierno.
El representante de Podemos (Echenique) solicita abiertamente la dimisión de Robles por dignidad (sic).
Unos días antes Margarita Robles había declarado que la responsabilidad del agujero de seguridad en las comunicaciones corresponde al Ministerio de Presidencia (Félix Bolaños).
Mis conclusiones.
En el tema de Marruecos crece la duda acerca del cambio de postura con respecto al Sáhara. Dicho “gesto” con la monarquía alauí no está claro si guarda relación co los pinchazos telefónicos de los ministros.
Bolaños es una persona bien preparada, pero con una capacidad sobresaliente en retorcer la realidad para que pierda cualquier parecido razonable. Fue una de las mentes que prepararon la operación del adelanto electoral en Murcia, ahora (perdido el decoro) pretende engañar a (casi) todo el que se deje, al resto le vale con confundirlos.
El gobierno Frankenstein vive una agonía política que desgraciadamente puede ser larga; Sánchez tiene todo el poder de su partido y ningún reparo con los cadáveres que deja por el camino. Ábalos, Iván Redondo, Juan Carlos Campo (firmó los indultos), González Laya (encausada por la entrada del líder saharaui de forma irregular), ahora es Paz Esteban; mañana puede ser Margarita Robles salvada, en principio, por la inminencia de la cumbre de la OTAN en Madrid.
Los independentistas se ven fuertes, puede que no consideren suficiente la pieza cobrada y la advertencia a todo el CNI sobre su capacidad de presionar al gobierno. Saben que un adelanto electoral puede arrojar una mayoría parlamentaria diferente, pero ante sus parroquias son galones de los que presumir.
Podemos discrepa del PSOE en temas fundamentales, se mantiene unido en el gobierno ante las perspectivas de una coalición de derechas y unos presumibles resultados electorales muy pobres. En las elecciones andaluzas se presume un descalabro significativo de la izquierda.
Pedro Sánchez está diplomado cum laude en supervivencia política. La pandemia, el confinamiento, los indultos, pactos con Bildu, al final la inflación y los tipos de interés pueden ser el final de la agonía.
De todas las vergüenzas (desvergüenzas) que ha protagonizado sin pausa y casi día a día nuestro, por desgracia, Presidente del Gobierno, este bochornoso tema de los espionajes, es el que más me ha dolido como español.
Es inaudito que, en lugar de defender el derecho de un estado democrático a investigar a los verdaderos enemigos de España, se baje los pantalones y se humille hasta extremos incalificables, ante tales declarados enemigos y, con tal de seguir en la poltrona, les ofrezca entrar a conocer todas las más delicadas cuestiones de seguridad nacional.
Estoy de acuerdo contigo, en que es muy probable que el tema del Sahara, esté estrechamente relacionado con todo este sucio y vergonzoso asunto
Relato sistemático y veraz del esperpento hispánico y de la extrema indignidad de » nuestro » gobierno . Asombra constatar la degradación colectiva pestilente que padecemos y que disfrutemos de la vida con ferias y fiestas, ajenos a la dura realidad de tantos y a nuestro propio negro futuro. Optimista que es uno. Muy bien Tomás